Esta conmemoración es momento para reflexionar sobre el impacto de la guerra en el medio ambiente, así como para exigir el cese de las hostilidades en muchas regiones del mundo por su tremendo impacto en miles de vidas, en el futuro de nuestro planeta y en las siguientes generaciones de seres humanos.

Estoy segura de que, en los próximos cinco años, la AIDH se consolidará como el mejor referente en educación en derechos humanos en las Américas, y lo lograremos con los mismos elementos que han caracterizado hasta ahora nuestro trabajo: pasión, esfuerzo, disciplina y compromiso hacia la causa más importante: la de los derechos humanos.

Somos madres buscadoras que no sólo buscamos a nuestros hijos e hijas, sino que seguimos exigiendo y construyendo junto al Estado la verdad, justicia y no repetición para que podamos vivir en paz y sin violencia en nuestra sociedad. Esa es nuestra lucha.

En 2030, cuando la quinta celebración del Día Mundial de la Estadística tenga lugar, habremos atravesado por muchas experiencias y concretado parte de los objetivos arriba mencionados; estaremos en otro punto del espacio, en este mismo planeta; se establecerán nuevas metas para las generaciones del futuro, otras formas de entender la vida; tendremos la oportunidad de plantear nuevas fronteras gracias a la gestión inteligente de datos; implementaremos mayores tecnologías para incluir a más personas en la comunicación efectiva de sus necesidades, cumpliendo nuevos sueños. Una fecha importante para todos.